¿Te has preguntado alguna vez si es mejor una crema con protección solar con o sin color?

Las cremas faciales con protección solar con color se han puesto de moda. Se trata de productos multifuncionales al combinar su acción hidratante o antiedad con la cobertura de maquillaje y la protección solar.

¡Sí! Nos ahorran tiempo por las mañana antes de salir de casa, porque lo tenemos todo en uno. Sin embargo, debemos tener en cuenta algunos aspectos para saber si se adaptan a nuestras necesidades y objetivos en el cuidado de la piel.

En primer lugar, por si tienes dudas, las cremas con protección solar con color ofrecen la misma protección que las que no lo llevan. Protegen de igual manera contra los efectos dañinos del sol, previniendo el envejecimiento prematuro y reduciendo el riesgo de cáncer de piel.

 ¿Qué debemos tener en cuenta?

1. Cantidad 

Cuando nos apliquemos una crema con protección solar con color puede que no nos apliquemos la cantidad necesaria para proteger bien la piel contra los efectos del sol. La razón está en que si aplicamos la cantidad necesaria (la regla de los dos dedos) con una crema con color, el tono de nuestra piel puede subir tanto que la veamos demasiado cargada de color. 

En el caso de que nos apliquemos un crema con protección solar sin color no tendríamos este inconveniente, pero si optamos por un producto pigmentado  modificaremos el color base del rostro y no nos veremos favorecidas, con lo que reduciremos la cantidad de crema protectora y por tanto su efectividad ante el sol.

 2. Cobertura

Las cremas con protección solar con color aportan una cobertura ligera o media. Si necesitas una cobertura más completa para ocultar imperfecciones o manchas, puede que se te quede corto.

3. Reaplicación

La protección disminuye con el tiempo, por lo que tendremos que reaplicar la crema a lo largo del día y sucederá lo mismo,  puedes ver tu piel muy subida de tono y sentirla pesada.

4. Variedad de tonos

Las cremas con protección solar y color tienen una limitada gama de tonos disponibles. Encontrar un tono que se adapte perfectamente a tu piel puede ser complicado.

Por tanto, las cremas con protección solar y color ofrecen una solución  multifuncional para el cuidado de la piel si buscas la simplicidad. Por otro lado, si buscas una cobertura más completa que proteja de forma efectiva la piel de los daños UV es mejor que te decantes por una crema con protección solar sin color.

La clave siempre estará en elegir la que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias individuales.